Sermon
Parábola de las diez jóvenes
Theme
Estad preparados para encontrarse con Jesús
Object
Campanas -- una por niño; Una linterna
Scripture
Mateo 25:1-13
Activities + Resources
Antes de empezar, dele a cada niño una campana. Pídale a los niños que mantengan la campana lo más quieta posible hasta que usted les dé más instrucciones.
¡Vaya! En el último año hemos visto muchos desastres naturales en nuestro mundo, como inundaciones, huracanes, terremotos, tsunamis, tornados e incendios. Una cosa que escuchamos una y otra vez estos días es que es muy importante para nosotros estar preparados en caso de una emergencia.
Recuerdo que cuando estaba en la escuela, solíamos hacer simulacros en caso de desastre. A veces era un simulacro de incendio. Entonces, tocaban la campana de la escuela tres veces. (Pídale a los niños que toquen sus campanas tres veces). Todos los estudiantes se colocaban en fila y marchaban fuera del edificio de la escuela a un lugar seguro. Cuando se aseguraban de que estaban a salvo, tocaban la campana dos veces para después volver a sus aulas. Si había un simulacro de tornado, tocaban la campana cuatro veces. (Pídale a los niños que toquen sus campanas cuatro veces). Los estudiantes se colocaban en fila y marchaban hacia una sala segura en el centro del edificio donde "debían agacharse y cubrirse". (Pídale a los niños que practiquen cómo agacharse y cubrirse). Los maestros siempre llevaban linternas en caso de que se apagaran las luces. Cuando estaban a salvo, tocaban la campana dos veces. (Pídale a los niños que toquen sus campanas dos veces). Luego los estudiantes volvían a sus aulas.
Es importante estar preparado cuando algo inesperado sucede. En nuestra escuela, era importante que todos los estudiantes y maestros conocieran la señal de advertencia, adónde ir, y la señal que les decía que era seguro volver a sus aulas. En un simulacro de tornado, los profesores tenían que asegurarse de que las linternas tenían baterías y que funcionaban correctamente. (Encienda la linterna y llévela a la sala). Estar preparado puede ser la diferencia entre estar a salvo o no estarlo... así que debemos estar preparados.
Jesús una vez contó una historia para enseñarnos la importancia de estar preparados. En la historia de Jesús, diez jóvenes novias tomaron sus lámparas de aceite y salieron para encontrarse con el novio. Jesús dijo que cinco de ellas eran insensatas porque tenían sus lámparas, pero no tenían ningún aceite extra para poner en sus lámparas. Cuando llegó el momento de salir a recibir al novio, se quedaron sin aceite. Las otras cinco eran muy sabias y estaban bien preparadas. Habían traído mucho aceite para sus lámparas. Cuando llegó el momento de salir y encontrarse con el novio, estaban listas.
En esta historia, el novio es Jesús y tú y yo somos las novias. Un día vamos a encontrarnos con Jesús y debemos estar preparados porque no sabemos exactamente cuándo va a venir. La gran noticia es que lo que hacemos para prepararnos es bastante simple. Debemos invitar a Jesús a entrar en nuestros corazones. Cuando lo hacemos, estamos preparados.
Amado Jesús, sabemos que un día nos encontraremos contigo cara a cara. Ayúdanos a prepararnos para ese maravilloso día. En el nombre de Jesús, amén.