¡Sí, tú puedes!

 ¿Alguna vez has sentido que eres demasiado joven o demasiado pequeño para hacer algo? ¿Alguno puede pensar en alguna ocasión en la que hayas dicho: "¡No puedo hacerlo!"? (Haga una pausa para escuchar las respuestas). Todos hemos dicho eso alguna vez. Quizá lo dijiste cuando el entrenador te pidió que jugaras en una nueva posición por primera vez, o mientras intentabas hacer tus tareas. (Sostenga el libro de texto). Todos alguna vez nos hemos sentido derrotados, y hemos dicho: "No puedo hacerlo". 

Nuestra lección bíblica de hoy es acerca de un hombre llamado Jeremías. Un día, Dios le habló a Jeremías y le dijo: "Antes de que nacieras, te elegí para que fueras Mi profeta ante todas las naciones".

Vaya, ¡ese es un propósito enorme! ¿Te imaginas ser elegido por Dios para decir sus palabras a todas las naciones del mundo?

Jeremías respondió: "¡No puedo! No sé hablar bien y, además, soy demasiado joven".

"No digas 'no puedo'", el Señor le respondió a Jeremías. "Si te digo que vayas a hablar con alguien, ¡ve! Y cuando te diga lo que tienes que decir, no omitas ni una palabra". Entonces el Señor extendió la mano, tocó la boca de Jeremías y dijo: "Te daré las palabras que debes decir, y te envío con autoridad para que hables a las naciones en mi nombre".

Dios llamó a Jeremías para cumplir con un propósito monumental incluso antes de que naciera. Pero no iba a dejar que Jeremías lo hiciera todo solo. También, Dios prometió darle a Jeremías todas las palabras que necesitaría para hablar. 

De la misma forma en la que Dios tenía grandes planes para Jeremías, Él también tiene grandes planes para ti. Él conoce tu nombre. Te conocía incluso antes de que nacieras y tiene un plan para tu vida. 

Habrá momentos en tu vida en los que Dios te pedirá, como hizo con Jeremías, que hagas algo importante para Él. Puede que te llame a hacer algo que parezca difícil, o incluso imposible. Puede que sientas que eres demasiado joven, e incluso quieras decir: "Simplemente no puedo hacerlo". Pero cuando eso ocurra, recuerda lo que Dios dijo a Jeremías: "No digas: 'No puedo'". "Si Dios te llama a hacer algo, él extenderá su mano y tocará tu vida para darte la capacidad de hacerlo.

Amado Padre, sabemos que hay cosas en la vida que no podemos hacer por nuestra cuenta. Pero sabemos que si nos pides que hagamos algo, Tú nos darás la capacidad de hacerlo. Tan sólo tenemos que confiar en Ti. Amén.