Sermón

Las promesas de Dios no son para reírse

Tema

Dios cumple sus promesas.

Objetos

Una Biblia

Escritura

“Tal como el SEÑOR lo había dicho, se ocupó de Sara y cumplió con la promesa que le había hecho. Sara quedó embarazada y le dio un hijo a Abraham en su vejez. Esto sucedió en el tiempo anunciado por Dios” (Génesis 21:1-2 – NVI).

Todas las semanas nos reunimos y compartimos historias que encontramos en este libro. (Enseñe la Biblia.) Cuando piensas en la Biblia, ¿crees que es un libro lleno de alegrías, risas y humor? Bueno, la historia bíblica de hoy es una que causó que los personajes principales se rieran. Es la historia de Abraham y Sara.

La historia comienza cuando Abraham tenía 99 años. Dios habló con Abraham y le dijo que su esposa, Sara, sería bendecida y que tendría un hijo. La Biblia nos dice que Abraham tocó el suelo con la frente y se echó a reír y se dijo a sí mismo: “Tengo 100 años. No puedo tener un hijo y Sara es de 90 años. Ella no puede dar a luz un hijo.”

Algún tiempo más tarde, Abraham estaba sentado frente a su tienda de campaña. Levantando su cabeza miró y vio que habían tres hombres frente a él. Fue hacia los hombres y les dijo: “Por favor, quédense un rato conmigo. Les traeré agua para lavarse los pies. Pueden descansar debajo de los árboles. Les conseguiré comida y podrán comer todo lo que deseen, luego podrán continuar su camino.”

Los hombres le dijeron: “Hazlo así.”

Así que Abraham fue a donde Sara y le dijo que horneara pan y preparara una comida para los hombres. Abraham les trajo los alimentos a los hombres y estaba listo para servirles cuando ellos preguntaron: “¿Dónde está tu esposa Sara?”

Abraham contestó: “Ella está en la tienda de campaña.”

Uno de los hombres dijo: “Vendré en la primavera. Para ese tiempo ya tu esposa Sara tendrá un hijo.”

Sara estaba escuchando desde la tienda de campana y oyó lo que el hombre dijo. Se rió para dentro de sí y dijo: “Soy vieja y mi esposo también. Soy muy vieja para tener un hijo.”

Entonces el Señor le dijo a Abraham; “Sara se ha reído y dijo que estaba muy vieja para tener un bebé. ¿Es que hay algo que sea muy difícil para el Señor? Vendré nuevamente en la primavera, tal cual dije que haría, y tu esposa Sara tendrá un hijo.”

Sara dijo: “¡No me he reído!”

Entonces el Señor dijo: “Eso no es cierto. ¡Ciertamente te reíste!” Entonces los tres hombres se levantaron para seguir su camino.

Al siguiente año, el Señor regreso a visitar a Sara tal como había prometido. Al llegar, Sara había sido bendecida con un bebé según había sido dicho por él. Abraham y Sara llamaron a su hijo, Isaac. ¿Sabes lo que significa ese nombre? Significa: ‘’Él se rió.”

¿Qué hemos aprendido de la lección de hoy? Hemos aprendido a tener paciencia ya que Dios cumplirá sus promesas, ¡aún cuando se tarde 100 años! También hemos aprendido que nada es difícil para Dios, aún cuando sus promesas nos hagan desear reírnos!

Oración:

Padre, ayúdanos a confiar en ti y recordar que cumplirás las promesas que nos hagas, tal como cumpliste la promesa que le hiciste a Abraham y Sara. En el nombre de Jesús oramos, amén.