Sermón

El poder y la luz

Tema

El Espíritu Santo

Objetos

Una linterna de mano y baterías (Se recomienda una LED)

Escritura

"Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse" (Hechos 2:4 - NVI).

¿Saben ustedes que día especial es hoy? Es Domingo de Pentecostés. Es el momento en que se nos recuerda que antes de Jesús regresar al cielo, había prometido que su Padre enviaría un ayudador - el Espíritu Santo - a vivir dentro de aquellos que le siguieran. Prometió que el Espíritu santo les daría poder para hacer cosas grandes y poderosas.

Y ocurrió tal cual Jesús dijo que haría. En el día que se llama Pentecostés, todos los discípulos estaban reunidos en un lugar. La Biblia nos dice que se oyó un sonido del cielo como una ráfaba de viento fuerte el cual llenó todo el lugar donde estaban reunidos. Luego aparecieron como llamas de fuego sobre cada uno de ellos. Al ocurrir estas cosas, los discípulos fueron llenados con poder y comenzaron a predicar y enseñar a otros acerca de Jesús. Pudieron hacer cosas que nunca antes habían podido hacer gracias al poder del Espíritu Santo en ellos.

En esta mañana he traído una linterna de mano para ayudarnos a entender cuán importante es el Espíritu Santo. Esta linterna no es muy grande, pero ¡qué mucho alumbra!, ¿no es así? Tengo varias de estas linternas de mano distribuídas por la casa. Hay una en la cocina, otra en la sala de estar, el cuarto y el baño. Si se va la electricidad y está oscuro, estas linternas de mano me ayudan a encontrar mi camino alrededor de la casa. Ellas son el sistema de electricidad de emergencia.

¿Qué piensas que le suple poder a esta linterna para que pueda iluminar un cuarto? Desde luego, la linterna tiene una batería (o baterías) dentro que le da ese poder, esa energía. Sin ese poder dentro de ella, la linterna no trabaja. Eso me recuerda la forma en que el Espíritu Santo trabaja en nuestra vida. En el Sermón del Monte Jesús dijo: "Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben al Padre que está en el cielo" (Mateo 5:16). Nuestra lección de hoy nos dice que en el día de Pentecostés la gente fue llenada con el Espíritu Santo para que pudieran hacer grandes cosas según la habilidad dada a cada uno de ellos por el Espíritu Santo. Es ese mismo poder del Espíritu Santo el que nos permite a ti y a mí dejar brillar esa luz en el mundo. Tal como una linterna debe tener baterías para darle poder, el Espíritu Santo es nuestra fuente de poder para vivir por Jesús.

Padre celestial, gracias por enviarnos el poder del Espíritu Santo. Por favor llénanos cada día con tu Espíritu Santo para que podemos tener el poder necesario para vivir por Jesús y dejar que su luz brille en nuestras vidas. En el nombre de Jesús oramos. Amén.