¿Que hora es?

Cuando era estudiante una de las cosas que la maestra nos enseñó fue el reconocer y decir la hora. Las manecillas pequeñas del reloj indican las horas y las manecillas grandes marcan los minutos. ¿Sabes cómo leer el reloj? Si la manecilla grande está en el doce y la pequeña está en el cuatro, ¿qué hora es? Así es, serían las cuatro. (Si da tiempo trate otras horas). La mayoría de nosotros ya no usa un reloj así, muchos usamos un reloj digital. Un reloj digital nos dice la hora y los minutos usando números, por ejemplo 11:15. Es más fácil, ¿verdad?

No importa la clase de reloj que usemos, la mayoría de nosotros lo mira varias veces al día para saber la hora que es. Supón que tu mejor amigo te va a recoger a las dos de la tarde para ir a ver una película. Lo primero que harías es asegurarte que estás vestido y listo para salir, y entonces, según se acerca la hora de salir, estarías esperando y asomándote por la ventana o el balcón para ver cuando llega tu amigo. Si sabes leer el reloj, probablemente lo mirarías frecuentemente para ver si es la hora de tu amigo llegar. Si no sabes leer la hora, estarías preguntándole a tu mamá: "¿Son las dos ya?"

Este domingo comienza una época muy especial llamada Adviento. ¿Sabes lo que quiere decir adviento? El diccionario dice que adviento es "la venida de algo muy importante." ¿Qué será? ¿Será la Navidad, la celebración del nacimiento de Jesús? Sí, esto es algo que estamos esperando, pero también estamos esperando la venida de otro evento muy importante. ¡El regreso de Jesús!

Jesús nos dijo que Él regresaría, pero no nos dijo ni cuando ni a la hora en que vendría. De hecho, dijo: "Nadie sabe el día y la hora en que vendré. Sólo el Padre lo sabe. Por eso deben estar preparados, porque vendré cuando menos lo esperen." Si no sabemos cuando llegará, ¿cómo podremos estar listos? Haciendo las cosas que Jesús desea que hagamos: amándonos, cuidando a los enfermos, alimentando a los hambrientos y ayudando a los pobres. Si hacemos estas cosas, estaremos listos para cuando Él llegue.

Pensándolo bien, ¡esas son las mismas cosas que debemos estar haciendo al prepararnos para la celebración de la Navidad! En lugar de pensar en qué vamos a recibir, debemos estar pensando en lo que podremos dar.

Querido Jesús, estamos esperando el día de tu regreso. Ayúdanos a vivir de tal manera que estemos listos cuando tú vengas. Amén.