Velando y esperando

Hoy comienza la época más excitante del año. Desde este momento en adelante comenzamos a contar los días que faltan para celebrar el día del nacimiento de Cristo. Me entusiasma esperar lo que esta época traerá: bella música, luces y decoraciones. En esta mañana he traído una estrella de Navidad. Vemos muchas de estas estrellas durante este tiempo navideño debido a la importancia de la estrella en la primera Navidad.

Estoy seguro que todos ustedes saben la historia de Navidad. Saben de cómo los sabios de Oriente vieron una estrella brillando en el cielo y la siguieron para ver a Jesús. ¿Porqué seguirían esa estrella los sabios? ¿Se dirían a sí mismos: "Caray, que brillante es esa estrella, quizás debíamos seguirla a ver dónde nos lleva?" No creo. Los profetas de Dios habían escrito sobre esa estrella cientos de años antes de que apareciera. Habían dicho cuándo y dónde aparecería y que anunciaría el nacimiento de Jesús. No estoy seguro pero quizás los sabios habían oído sobre estas profecías, así que cuando vieron la estrella sabían a dónde les llevaría.

Si la historia de Navidad terminara con la estrella guiando a los sabios a Jesús, no tendríamos mucha esperanza, ¿verdad? Pero no termina ahí. De hecho, ¡no ha terminado todavía! La Biblia nos dice que de igual manera que Jesús vino a nacer en un pesebre, Él vendrá nuevamente. La próxima vez que Él venga, nos llevará a vivir con Él al cielo. ¡Ese sí es un mensaje de esperanza! ¡Ese es el verdadero mensaje de Navidad! Igual que los sabios velaban y esperaban por la estrella que los llevaría a Jesús, tú y yo estamos velando y esperando por su venida.

Oración: Amado Jesús, durante esta época cuando echamos una mirada al pasado y recordamos tu nacimiento también estamos velando y esperando tu venida.