Sermon

¿Quién desea ser un millonario?

Theme

Dándole a Dios el primer lugar en tu vida.

Object

Una guía de televisión o una revista similar.

Scripture

Los discípulos se asombraron de sus palabras; pero Jesús, respondiendo, volvió a decirles: Hijos, !!cuán difícil les es entrar en el reino de Dios, a los que confían en las riquezas! Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. (Marcos 10:24-25 NVI)

Hay muchos clases de programas de televisión muy distintos unos de otros. Hay comedias, shows policiacos, novelas, programas en que presentan a diferentes personalidades, programas de juegos y otros. ¿Qué clase de programas te gusta ver? ¿Cuál es tu favorito? Uno de mis favoritos es ¿Quién quiere ser un millonario? Sí, yo sé que es un programa viejo, pero aún me gusta.

¿Quién quiere ser un millonario? Probablemente muchos de nosotros contestaríamos SÍ a esa pregunta. Una comediante famosa de nombre Sophie Tucker dijo una vez: "He sido rica y he sido pobre. Créanme, rica es mejor." Me pregunto que diría Jesús sobre eso.

Un día, mientras Jesús recorrían un camino, un hombre joven y rico vino corriendo hacia él. "Maestro bueno," dijo el hombre, "¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna?"

"Sabes los mandamientos," Jesús contestó. "No mates. No adulteres. No hurtes. No digas falso testimonio. No defraudes. Honra a tu padre y tu madre."

"He hecho todo esto desde que era niño," respondió el joven rico.

La Biblia dice que Jesús le miró y le amó. Entonces le dijo: "Sólo te falta una cosa. Vende todo lo que tienes y da el dinero a los pobres y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme." Cuando el joven escuchó esas palabras, se entristeció porque tenía muchas posesiones.

Jesús miró a sus discípulos y dijo: "¡Cuan difícil es para una persona rica entrar al reino de Dios!" Los discípulos se asombraron. Jesús continuó: "Es muy difícil entrar al reino de Dios. Es más fàcil para un camello entrar por el ojo de una aguja que entrar un rico en el reino de Dios."

"¿Quién podrá ser salvo entonces?" preguntaron los discípulos.

"Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios," le contestó Jesús.

No era por las riquezas que el joven rico no podía entrar al reino. Era porque su amor hacia el dinero era mayor que su amor hacia Dios. Si alguno desea entrar al reino de Dios, debe darle en su vida el primer lugar a Dios.

¿Quién quiere ser un millonario? Quizás eso no es tan importante después de todo.

Querido Padre, ayúdanos a darte el primer lugar en nuestra vida. Amén.