Sermón

Haz lo que te dice que hagas

Tema

Jesús desea hacer buenas cosas en nuestra vida

Objetos

Una invitación a una boda

Escritura

"Su madre dijo a los sirvientes: Hagan lo que él les ordene" (Juan 2:5-NVI).

¿Has estado en una boda en la cual algo haya salido mal? ¿Sabes?, eso ocurre en ocasiones, Una vez fui a una boda en la cual el ministro llamó a la novia con un nombre equivocado todo el tiempo. Hmm…me hizo pensar si estarían realmente casados. También hubo la ocasión en la cual el celular del papá de la novia sonó en el momento menos oportuno. Para hacer la situación peor, ¡el novio estiró el brazo, sacó el teléfono móvil del bolsillo del papá de la novia y lo contestó! Niños pequeños esparciendo flores y llevando anillos, ofrecen un sinnúmero de momentos de gran humor. ¡Escuché de una boda en la cual al final de la ceremonia, cuando el ministro dice: "Puede besar la novia," el niño que llevaba los anillos le dio un beso a la niña que esparcía las flores!

En la lección bíblica de hoy, Jesús se encontraba en una boda. Era un evento grande y casi todos en el pueblo de Caná estaba allí. No solo estaba Jesús, sino sus discípulos y María, su madre, asistieron también. Después de la ceremonia de la boda, hubo una gran fiesta y una cosa terrible aconteció. ¿Sabes qué fue lo que ocurrió? ¡Se le terminó el vino! ¡Oh!, ¿qué podría hacer el padre de la novia? Estaba seguro que desde ese día sería conocido como el padre que no compró vino suficiente para la fiesta de boda de su hija.

La madre de Jesús escuchó lo que había acontecido y no deseaba que su amigo fuera avergonzado, así que buscó a Jesús. Cuando lo encontró le dijo: "Ya no tienen vino."

Jesús le contestó: "Mujer, ¿eso qué tiene que ver conmigo? Todavía no ha llegado mi hora."

Pero María no se desanimó. Dio vuelta y le dijo a los sirvientes: "Hagan lo que él les ordene."

Cerca del lugar donde estaban parados, habían seis tinajas de piedra para el agua. En cada jarra o tinaja cabían veinte o treinta galones de agua.

"Llenen las tinajas con agua," les dijo Jesús a los sirvientes. Así que llenaron todas las tinajas hasta el borde. Entonces Jesús les dijo: "Ahora saquen un poco y llévenlo al encargado del banquete." Los sirvientes lo hicieron y cuando él lo probó, el agua había sido cambiado en vino.

El encargado del banquete llamó al novio y le dijo: "La mayoría de las personas sirven el mejor vino primero. Luego, cuando todos los invitados han bebido mucho, sirven el vino más barato; pero tú has guardado el mejor vino hasta ahora."

De esta manera, en la boda de Caná, Jesús llevó a cabo su primer milagro. Allí fue que demostró su gloria y sus discípulos creyeron en él.

Debido a que los sirvientes hicieron lo que Jesús les dijo que hicieran, una cosa buena sucedió. Jesús desea que cosas buenas ocurran en nuestra vida también. Si hacemos lo que Jesús nos dice que hagamos, cosas buenas también nos ocurrirán.

Padre, te damos gracias por enviar a tu Hijo. Ayúdanos a hacer lo que nos ha dicho que hagamos en tu Santa Palabra. En el nombre de Jesús oramos, amén.