Sermón
Una vida fructífera
Tema
Se espera que los árboles frutales den frutos, nosotros también.
Objetos
Una manzana. (Higos serían apropiados también).
Escritura
"Dijo también esta parábola: Tenía un hombre una higuera plantada en su viña, y vino a buscar fruto en ella, y no lo halló. Y dijo al viñador: He aquí, hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo; córtala; ¿para qué inutiliza también la tierra? Él entonces, respondiendo, le dijo: Señor, déjala todavía este año, hasta que yo cave alrededor de ella, y la abone. Y si diere fruto, bien; y si no, la cortarás después" (Lucas 13:6-9 - NVI).
Actividades + recursos
¿A cuántos de ustedes le gustan las manzanas? Una manzana buena y jugosa en una de mis meriendas favoritas. Escuchen esta información de las manzanas.
- Las manzanas no sólo saben bien, sino que son buenas para ustedes. No tienen grasa, sal, ni colesterol y son una buena fuente de vitaminas necesarias para crecer.
- La manzana que tengo hoy se llama "Roja Deliciosa," pero quizás te sorprenda saber que hay sobre 7500 clases de manzanas en el mundo.
- Los primeros cinco países productores de manzanas son China, Estados Unidos, Turquía, Italia y Francia.
Hay muchas maneras de disfrutar de las manzanas. Por ejemplo, puedes tomas jugo de manzana o cidra de manzana. A algunos niños le gusta llevar compota de manzana en su lonchera o bolsa de merienda. ¿Han probado ustedes la mantequilla de manzana en la tostada de la mañana? Una de los deleites más apetecibles son las rodajas de manzanas sumergidas en caramelo. Pero mi preferido, desde luego, es el pastel de manzana.
Estoy seguro que todos ustedes saben de donde provienen las manzanas. Vienen de árboles de manzano. Bueno, ¿qué pasaría si plantaras un árbol de manzano en tu jardín, le echaras agua, lo cuidaras y nunca produjera manzanas? No serviría, ni sería, un buen árbol de manzano.
Jesús contó una historia acerca de un hombre que tenía una higuera o árbol de higo en su viña (finca) la cual no le producía higos. Esperó tres años para que la higuera produjera su fruto, pero no produjo higos. Él fue al viñador (cuidador) de la higuera y le dijo que la cortara. El cuidador le pidió que le diera un año más para fertilizarla y atenderla más y luego verían si daba higos. El dueño le permitió atenderla un año más.
Al contarnos esta historia acerca del árbol frutal, Jesús realmente estaba hablando de nosotros y de Dios. Dios nos ha "sembrado" en esta tierra y espera que produzcamos buen fruto en nuestra vida. ¿Qué clase de fruto espera Dios de nosotros? Cosas como amor, gozo, paz, paciencia, bondad y gentileza. Cuando no ve estas cosas en nuestra vida, se siente muy defraudado, pero está dispuesto a darnos otra oportunidad.
Jesús quiere cuidarnos y ayudarnos a ser hijos de Dios que demos frutos como él desea. Si confiamos en él, leemos su Palabra y oramos, él nos ayudará a producir buen fruto.
Querido Jesús, ayúdanos , en nuestra vida, a tener el fruto que sea agradable a nuestro Padre celestial. Amén.