Sermón
Persistencia en la oración
Tema
En ocasiones dejamos de orar demasiado pronto.
Objetos
Un objeto que represente algo que tu deseabas tanto que te pasabas pidiéndolo constantemente.
Escritura
"Jesús les contó a sus discípulos una parábola para mostrarles que debían orar siempre, sin desanimarse" (Lucas 18:1 NVI).
Actividades + recursos
¿Has querido algo alguna vez tanto que te pasas pidiéndoselo a tu mamá y papá una y otra vez hasta que al fin te lo compraron? Quizás deseabas un juguete especial, una mascota o una bicicleta nueva. Si era algo que realmente deseabas, no hay duda que lo pedirías una y otra vez.
Había una vez un niñito que deseaba más que nada tocar en la banda escolar. Un día el niño, saliendo de la escuela, regresó a su casa y le pidió a sus padres si podían comprarle un instrumento y si le permitían apuntarse para tocar en la banda. Los padres no dijeron que sí, pero trampoco dijeron que no. Ellos dijeron: "Tendremos que pensar esto. Después de todo, un instrumento musical cuesta mucho dinero y no estamos seguros de que que seguirás tocándolo".
Pasaron varios días y los padres del niño todavía no habían dicho nada, así que el niño decidió preguntarles otra vez. Los padres no dijeron que sí, pero tampoco dijeron que no. Ellos dijeron: "Estamos todavía pensándolo".
Caminando de la escuela a su casa el niño decidió pasar por la tienda de instrumentos musicales. Cuando entró en la tienda lo primero que le llamó la atención fue una trompeta preciosa y brillante No era nueva, pero estaba en muy buenas condiciones y tenía ésta un maletín de piel de cocodrilo para guardarla. Era lo que deseaba.
Esa noche, durante la cena, el niño le dijo a sus padres: "Hoy, después de la escuela, pasé por la tienda de instrumentos y ví que tenían una trompeta usada. Es exactamente lo que deseo y sólo cuesta $100.00".
El padre, mirando a la madre dijo: "Creo que es hora de que vayamos a ver esa trompeta o nunca terminaremos de oír esto". Al día siguiente el niño fue con sus padres a la tienda de instrumentos y compraron la trompeta.
El niño se unió a la banda y se mantuvo tocando en ella. Tocaba en ella cuando llegó a la escuela superior (grados 10, 11, 12). Cuando se graduó de escuela superior, fue a colegio y decidió estudiar música. Al graduarse de la universidad se convirtió en maestro de música. Me pregunto cuán diferente hubiera sido su vida si le hubiese pedido el instrumento a sus papás una sola vez y no se lo hubiera mencionado nunca más.
La Biblia nos enseña que tal como nuestros padres desean lo mejor para nosotros y están dispuestos a darnos lo que les pedimos, Dios, nuestro Padre celestíal, también desea escucharnos y contestar nuestras peticiones. A veces le pedimos a Dios algo una sola vez y nunca más lo mencionamos. Quizás esa es la forma en que demostramos nuestra impaciencia. Cuando le pedimos algo a Dios deseamos que nos diga "Sí" y ¡queremos que nos lo diga ahora! Jesús dijo que debemos orar contínuamente y no darnos por vencidos. Quizás Dios sólo desea que le demostremos que queremos realmente lo que pedimos. ¿Quiere decir ésto que si continuamos pidiéndole lo mismo a Dios, él nos lo dará? No, pero nos ama y desea lo mejor para nosotros y contestará "Sí", si es lo mejor.
Querido Padre, enséñanos a orar y enseñanos a ser pacientes y persistentes en la oración. Si deseamos cosas buenas, recuérdanos que necesitamos orar una y otra vez. En el nombre de Jesús oramos, amén.