En la cima de la montaña

Tengo una fotos preciosas para enseñar en esta mañana. Son fotos de algunas de las más preciosas cimas de montañas que puedan imaginar. ¿No son bellas? ¿Alguna vez has pasado tus vacaciones en las montañas? De todas las vacaciones que he tomado, las que más he gozado son las que tome en las montañas.

¿Porqué crees que las personas gozan pasando sus vacaciones en las montañas? Hay varias razones. Una es que ellos desean alejarse del calor. Durante los meses de verano, el calor puede ser insoportable en ocasiones. Es reconfortante subir a las montañas donde el aire es fresco. Otra razón es que se puede gozar de una vista preciosa. Cuando estás en el valle, generalmente es difícil ver y apreciar la belleza a tu alrededor, pero desde la cima de la montaña, puedes ver claramente la belleza del valle. Finalmente, muchas personas gustan vacacionar en las montañas para alejarse del bullicio y del ruido de la vida diaria. Es bueno el alejarse de las presiones del trabajo y compromisos y tomar un tiempo para relajarse. Cuando estamos gozando de esos momentos en las montañas, a veces se nos hace difícil regresar a nuestro diario vivir.

¿Sabías que a Jesús le gustaba retirarse a las montañas? La Biblia nos dice que un día Jesús se llevó a Pedro, Santiago y Juan a la montañas para poder estar solos. Mientras estaban en la cima, la apariencia de Jesús cambió. Sus ropas cambiaron a ser un blanco resplandeciente, más blanco que cualquier blanqueador pudiera llegar a blanquearlas. Entonces aparecieron Elías y Moises y comenzaron a hablar con Jesús. Pedro exclamó: "Maestro, ¡qué bien que estemos aquí! Podemos levantar tres albergues: uno para ti, otro para Moisés y otro para Elías." Entonces vino una nube sobre ellos y se oyó una voz de la nube diciendo: "Éste es mi Hijo amado. ¡Escúchenlo!" Y cuando miraron nuevamente, vieron a Jesús solo.

Me imagino que Pedro, Santiago y Juan estarían muy felices al desear quedarse en la cima de la montaña, pero, ¿se quedaron? No, Jesús sabía que el propósito de su experiencia en la cima de la montaña era para renovar sus fuerzas para los días difíciles a los cuales se iban a enfrentar, así que guió a sus discípulos hacia el valle.

Tú y yo necesitamos unas vacaciones en las montañas de vez en cuando para ayudarnos a soportar el calor y las tensiones de nuestro diario vivir. Necesitamos también tener una experiencia en la cima de la montaña en nuestro diario caminar con Jesús. Necesitamos esas experiencias para renovar nuestras fuerzas para las tareas difíciles a las cuales nos enfrentaremos al seguir a Jesús cada día.

Padre amado, estamos agradecidos por la experiencia maravillosa que nos das en la cima de la montaña la cual renueva nuestras fuerzas para nuestro caminar diario contigo. En el nombre de Jesús oramos. Amén.